Hola: Hoy no os voy a entretener demasiado. Solo escribo para contaros que la mamografía no fue tan horriblemente dolorosa como la última. La máquina era diferente...y supongo que mis mamas también son diferentes ahora. No quiero decir que fuera agradable, ni mucho menos, pero al menos sí fue soportable. A continuación me hicieron una ecografía como ya viene siendo habitual. El trato del personal sanitario fue como siempre exquisito. Se agradece el cariño y delicadeza con la que te tratan. No sé si alguna de las personas que me han tratado leerán este blog, pero si es así desde aquí les doy nuevamente las gracias por su buen hacer. Todavía no tengo los resultados, pero espero que no haya nada reseñable que añadir en la próxima entrada al blog... Cambiando de tema, quiero compartir en esta entrada mis avances de hidratación en la piel. La manteca de karité sí que se nota. Tengo la piel mucho mejor aunque aún no bien del todo. Además, la hija de una compañera del trabajo está ahora
El sopapo de la vida que te espabila