Hola: Nuevamente os entretengo con una entrada sobre mi día a día y mis experiencias durante el tratamiento. Como novedades deciros que el ducharse con una pastilla de jabón tiene su aquel para que no se te caiga al suelo. Principalmente es importante estar concentrada en lo que se está haciendo y agarrar lo más ergonómicamente posible el jabón. El puñetero tiene la mala costumbre de resbalar y provocar un momento carcelario cinematográficamente hablando 😜 especialmente cuando está más nueva la pastilla (eso o es que me he ido habituando y ya se me cae menos jajaja). Confieso que ya he comprendido porqué triunfó el gel de baño 😄 Ya en serio, hay que tener cuidado porque es peligroso que se caiga; puedes pisar la pastilla y esmorrarte en menos de un pestañeo. En el hospital te indican que no hay que usar esponja así que directamente te duchas a la antigua usanza: Pastilla, agua y manita. Como ya os comenté, el jabón debe ser neutro y a mí me recomendaron el Lagarto de toda l
El sopapo de la vida que te espabila