Hola: Una vez más aquí ando escribiendo en el blog. Mis días ahora son muy relajados, porque así debe ser. El postoperatorio es bueno llevarlo sin estrés. Tengo que recuperarme de mucha tralla... La cicatriz molesta y pica, pero ya solo duele a ratos con lo que he dejado de tomar analgésicos. Sigo con el resto de la medicación diaria, así que cuanto menos pastillas consiga tomar mejor para mi hígado, ¿verdad?. Mi cuerpo mantiene aún toxicidad y sus efectos se notan. Continúo con los dedos insensibles, el pie izquierdo dormido, me duelen los huesos (sobre todo las rodillas), me fatigo enseguida y tengo flemas. Para colmo con los corticoides duermo a trompicones, estoy hinchada y mi cara me resulta muy extraña cuando me miro al espejo. Al menos el pelo me está creciendo, despacio, pero sin pausa. Estoy cansada pero me noto mejor que hace un mes por ejemplo. Anímicamente estoy fuerte porque sé que el final de esta pesadilla cada día está más cerca. Ya queda menos. P
El sopapo de la vida que te espabila