Hola: Voy a daros una noticia que es triste, al menos muy triste para mí. El pasado jueves 20 de abril por la tarde falleció Julia. He tardado en escribir porque este post es difícil de teclear. Los sentimientos están ahí pero las palabras huyen porque saben que no son suficientes para describirlos. La vida es fugaz. Nuestra existencia es como arena entre las manos que se va diluyendo hasta dejar tan solo unos granos en nuestras palmas que son lo verdaderamente importante. Julia es uno de esos granitos que voy a procurar conservar en la palma de mi mano. Ella ya no está, pero su energía queda en quienes la apreciaban y querían; su familia, amigos y conocidos. Tuve suerte de compartir mi habitación de hospital con ella, mucha suerte. Julia era una persona de las que deja huella. La fortuna quiso agraciarme con su presencia en mi vida. Una aparición demasiado corta pero no por ello insignificante, todo lo contrario. Aún recuerdo la última vez que hablé co
El sopapo de la vida que te espabila