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Ojos, masajes y cola de caballo

Hola:
Pues aquí seguimos, paso a paso sin desviarnos del camino para dar la patada definitiva a esta enfermedad llamada cáncer.

Hoy os puedo contar lo que me ha dicho el oftalmólogo esta mañana. Después de leer las típicas letras de la pared que van encogiendo endemoniadamente, me echaron unas gotas en los ojos y esperé mi turno para que me viera el doctor. En esos veinte minutos largos noté como mi visión se hacía más borrosa. Cuando tocó mi turno el oftalmólogo realizó el examen físico y me hizo las preguntas de rigor. Lo que más gracia me hizo fue que en uno de esos chequeos se puso una luz cual minero. La incomodidad de la luz y el deslumbramiento me trajeron de vuelta de esos pensamientos comparativos. Tras otras gotas y un par de pruebas más me dio el diagnóstico. Seré breve; tengo el cristalino con una leve opacidad debido a los corticoides. Así, tal cual. Hablando en cristiano, es una leve catarata. La visión parece que no está afectada (aunque yo tengo la sensación de ver un poco peor, pero bueno, si el médico lo dice será cierto). La noticia me ha sentado mal...¡Cómo adoro los corticoides! (irony on) 😒
En fin, por suerte es algo que se queda así estable y no va a más, al menos eso me ha dicho el doctor.

Por el momento esta es la novedad que tengo. Sigo con el dolor en el costado aunque parece estar disminuyendo ligeramente de intensidad. Ayer estuve dos horas en fisioterapia para poner la espalda y las piernas a tono. He perdido mucha forma física en estos meses (por no decir que actualmente no tengo ninguna) y necesitaba ayuda para mejorar. Tengo que volver en breve para rematar la jugada y posteriormente realizar un mantenimiento.
Con la quimioterapia no me recomendaron que me dieran masajes terapéuticos. De hecho, tengo entendido que está contraindicado porque se produce vasodilatación y una activación del sistema linfático, lo cual puede ayudar a una posible metástasis.

Sea como fuere ayer me dieron una pequeña paliza. Estoy un poco magullada pese a que la fisioterapeuta me trató con más suavidad de lo normal. Me dijo que tenía la espalda bastante mal y la zona del costado parecía estar inflamada, cosa que ya me imaginaba yo por mis dolores.

También comentaros que ayer comencé a tomar cola de caballo en pastillas. Pregunté a mi doctora de cabecera si podía tomar un diurético como la cola de caballo para acelerar el desinfle de mi cuerpo y me contestó que sí pero sin pasarme, que durante un mes podía hacerlo. Para vuestra información, la cola de caballo no es recomendable tomarla más de 6 semanas. El motivo es que descompone la tiamina (vitamina B1), reduce el azúcar en sangre y aumenta la eliminación del potasio del organismo conque puede provocar hipopotasemia. Una vez informada y habiendo consultado al médico decidí probar durante un mes.
Así pues me encaminé a un supermercado que vende infusiones y píldoras de este tipo y me decanté por las cápsulas ya que el sabor de esta hierba es horrible. Al menos mi recuerdo adolescente del sabor de las infusiones de cola de caballo me produce repulsión. 
En la caja indica que hay que tomar de 4 a 6 comprimidos diarios...a mí me parece demasiado y estoy tomando solo 2 cápsulas al día. Ya estoy notando que mis visitas al baño han aumentado su frecuencia. Espero en un par de semanas notar cambios en mi físico. Sé que no hay que esperar milagros, pero un poquito de ayuda siempre viene bien, ¿verdad?
Quiero volver cuanto antes a mi normalidad, siendo consciente de que ya no será igual que antes. Todo lo que pueda hacer para remontar, lo haré. Una pregunta que suelo hacer ya a los doctores es "¿qué está en mi mano para mitigar efectos o ayudar a que desaparezcan?".

En fin, por ahora no tengo mucho más que contar. A ver qué me dice la oncóloga en la siguiente consulta y a ver cómo evoluciona mi costado.

¡Hasta la siguiente!

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